Las notas marinas tranquilas, se alían al ozono impalpable y a las notas afrutadas de piña, melón, casis y membrillo. Las flores de nenúfar, espino blanco, lirio de los valles y jazmín, aportan su transparencia aérea, mezclándose con la madera de vetiver y sándalo, para terminar con una pizca de melocotón y mora que da calidez al conjunto.